Juan Antonio Planas, presidente de la Asociación de Psicopedagogía de Aragón, nos habla de las diferencias para los niños de nacer un 31 de diciembre o un primero de enero en el acceso a las aulas.
Planas puntualiza las diferencias sobre nacer a final de un año o al principio del siguiente a la hora de la escolarización; supone que convivirán en una misma aula niños con una diferencia de un año. Este problema se acrecienta en varones dado que les cuesta más madurar que a las mujeres. Dado que la escolarización suele comenzar sobre los tres años y en esa edad la diferencia de un año supondría un tercio de su vida, podría acarrear problemas, por ejemplo, de control de esfínteres y suponerle problemas de auto estima.